Con una tarde más o menos agradable (no sé los efectos si ya hubiera estado nevando), una buena "camellada", y con mucha inseguridad para escoger el mejor árbol, al fin lo logramos cortar (más bien diría "derribar", ya que cuando había cortado un par de pulgadas, decidí utilizar un poco la "fuerza bruta").
No comments:
Post a Comment